¿Qué es el TOC?
TOC es la sigla compuesta a partir de la expresión Trastorno Obsesivo Compulsivo. Este se refiere a una alteración conductual caracterizada por la presencia de obsesiones y/o compulsiones.
Podemos entender las primeras como pensamientos, ideas, imágenes o impulsos que aparecen de forma intrusiva y frecuente produciendo malestar o ansiedad a la persona que lo experimenta.
El contenido de las obsesiones varía dependiendo de la historia de aprendizaje de la persona y sus preocupaciones más salientes, aunque las más habituales se relacionan con la salud, la higiene o la sexualidad.
Las compulsiones se refieren tanto al comportamiento manifiesto -conductas visibles por otras personas- como a las operaciones mentales que se llevan a cabo con el objeto de aliviar la ansiedad o evitar un posible mal futuro. También en este caso la persona experimenta comúnmente la sensación de no poder evitarlo. De nuevo, estos comportamientos pueden variar en función de la persona, siendo los más habituales lavarse, comprobar y limpiar, repetir acciones y contar.
El problema de la etiqueta
En esta reflexión de 2002 en torno a la conducta, Esteve Freixa menciona el problema de la tautología en la definición de un fenómeno, en este caso comportamental, tan pertinente cuando hablamos de etiquetas diagnósticas: “un fenómeno y su explicación son dos cosas distintas”. ¿Por qué me han diagnosticado de este modo? Porque experimento distintas obsesiones y/o compulsiones. ¿Por qué las experimento? Porque sufro un TOC.

Busquemos más allá de la etiqueta. David Pulido explica este mismo error conceptual en relación a la depresión en este artículo: “Precisamente para poder entender las causas y establecer un buen tratamiento de los síntomas debemos analizarlos y estudiarlos por separado y en relación a la historia clínica de cada paciente, que es justo lo contrario de poner una etiqueta global”.
Ningún problema psicológico “brota” espontáneamente, de la noche a la mañana, en ausencia de una problemática previa o variables específicas en nuestra historia que nos predispongan a ello.
El origen del TOC
Analizando la sintomatología
La mayoría de las personas podemos experimentar obsesiones en algún momento de nuestra vida. Según la investigación, la variable que diferencia un suceso ocasional de una problemática consolidada es la existencia de ciertas creencias. Por ejemplo, considerar que la ocurrencia de un evento peligroso o catastrófico depende de algo que hayamos pensado, llevándonos a realizar una conducta para neutralizar el efecto del pensamiento. También el perfeccionismo puede jugar un papel aquí, generando el convencimiento de que hay una única forma válida de hacer las cosas, en un orden determinado y con unos pasos concretos, siendo todo ello inalterable. En ocasiones, una magnificación de las implicaciones del pensamiento puede dificultar diferenciar este de la realidad, generando la necesidad de comprobar una y otra vez si ha llegado o no a realizar lo que ha pensado.
Sin embargo, estas creencias por sí mismas no explican necesariamente la consolidación de un problema obsesivo-compulsivo. De nuevo recordamos la importancia de analizar cada conducta de forma independiente y siempre en el marco de la historia de aprendizaje de la persona. Este trabajo se lleva a cabo estudiando la relación que se establece entre las diferentes variables que intervienen en cada conducta: analizamos “dicho comportamiento en términos de sus antecedentes (las cosas que ocurren antes y con las que está relacionado) y sus consecuentes (las cosas que ocurren después)” (Froján Parga, Mas, 1999) o, dicho de otro modo, qué lo inicia y qué lo mantiene.
El alivio de la ansiedad como explicación funcional
En la expresión explicación funcional el segundo término hace referencia a cómo se relacionan ciertas variables entre sí en un problema, qué función cumple cada elemento del análisis. Por ejemplo, tener un pensamiento, emitir una conducta ritual y la ansiedad.
Si bien es imprescindible realizar un estudio específico para determinar todas las variables en cada caso, se ha propuesto como modelo explicativo en el mantenimiento de las conductas en un problema obsesivo compulsivo la reducción inmediata y temporal de la activación (Rachman, 1977; Foa y Steketee, 1979). A la ejecución de las compulsiones o, en algunos casos, las obsesiones, le sucede un instantáneo y fugaz alivio de la ansiedad: esto explica la consolidación de esta conducta como estrategia para luchar contra esa emoción tan desagradable -y cara para el organismo- que es la ansiedad. Una estrategia que, no obstante, no es eficaz a medio plazo.
Veámoslo en el ejemplo: en un contexto dado de creencias como las antes mencionadas, aparece un pensamiento, una anticipación catastrófica. Esta idea va ligada a una emoción muy intensa y angustiosa de activación: ansiedad. En algún momento la persona descubre que ejecutando una conducta particular -contar mentalmente hasta siete- es capaz de sentir alivio -bajo la creencia de que esto evitará la catástrofe. Se trata de un alivio momentáneo, pero poderoso, que explicará que, en sucesivas situaciones, la persona vuelva a realizar este comportamiento, contar mentalmente, cada vez más frenéticamente, pues la ansiedad no llega a desaparecer.

¿Cómo se trata un TOC?
Tal vez una de las creencias más extendidas -y erróneas- al respecto de este problema es que se trata de una condición irreversible o que forma parte de la persona. Como otros problemas psicológicos, las obsesiones y compulsiones son conductas aprendidas que pueden desaparecer con la terapia adecuada.
Aunque el tratamiento específico dependerá de cada caso analizado, los procedimientos más habituales para tratar esta problemática incluyen el trabajo con las creencias antes mencionadas y la progresiva reducción de las conductas compulsivas y obsesivas a través de técnicas como la parada de pensamiento y la exposición.
¿Qué hacer si identifico en mí comportamientos compatibles con un TOC?
Tanto si te encuentras experimentando esta situación como si sospechas que algunas de tus conductas podrían estar relacionadas con ella, la consulta profesional evaluará tu situación y, en caso de existir un problema definido, te permitirá establecer unos objetivos de tratamiento y un mapa de intervención para ayudarte a mejorar lo antes posible.
Escrito por Aitana Segovia
Para saber más:
¿Qué es un tratamiento psicológico? María Xesús Froján Parga, José Santacreu Mas.1999. Biblioteca Nueva. ISBN: 9788470306525
Tratando… Trastorno obsesivo – compulsivo. Aurora Gavino Lázaro (2005). Pirámide. ISBN: 9788436819403
¿Qué es conducta? Esteve Freixa i Baqué.
http://extension.uned.es/archivos_publicos/webex_actividades/6092/queesconducta.pdf
Buenas noticias: por qué es imposible caer en depresión. David Pulido para El Confidencial
https://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2015-03-18/buenas-noticias-por-que-es-imposible-caer-en-depresion_729958/
Y si quieres saber más sobre la ansiedad:
https://www.itacopsicologos.es/ansiedad-parte-1/
https://www.itacopsicologos.es/ansiedad-parte-2/
